Diferencia entre crédito y préstamo. Pros y contras
Préstamo o crédito, ¿qué diferencias hay?
¿Es mejor pedir un crédito o un préstamo?
Es habitual que ante la necesidad de buscar «dinero rápido» realizar reformas en tu hogar, empezar un nuevo proyecto empresarial o quizás darte un capricho como un viaje quieras pedir un crédito o préstamo.
Dos términos que en finanzas son distintos pero que para alguien ajeno al mundo de la economía puede resultar ser lo mismo. Financiarte con dinero ajeno es la razón por la que se suele solicitar un préstamo o un crédito. Diferentes maneras, mismo objetivo.
Pedir préstamo hasta 15000€
Préstamo y crédito diferencias
Antes de ponerte en materia concreta, vamos a definir ambos términos para que lo tengas claro.
Qué es un préstamo
El préstamo es la cantidad fija de dinero que una entidad o persona, en este caso prestamista, entrega a otra, llamada prestatario.
En esta operación financiera la condición es que la persona que ha recibido el dinero devuelva la cantidad junto con los intereses, sobre el dinero total prestado, en un plazo ya pactado. Esta devolución puede hacerse mediante cuotas regulares de manera mensual, trimestral o semestral, entre otros.
Seguro que te resultan familiares estos tipos de préstamos: hipotecario, personal, de estudios.
Qué es un crédito
El crédito se refiere a la cantidad de dinero que una entidad dispone a un cliente. Una cantidad de dinero que solicita el cliente y en la que no se fija cantidad ni plazos de devolución exactos.
Una de las características del crédito es que al cliente no se le da el dinero total al comenzar el crédito. Podrá usarlo según le convenga a través de un modo de pago, como puede ser una cuenta o una tarjeta de crédito.
En el caso del crédito, el cliente puede disponer de todo el dinero, de una parte o de ninguna. A pesar de que solo se paga interés por el dinero usado, es habitual que se cobre una comisión sobre el saldo no dispuesto.
¿Crédito o préstamo?
Hay cuatro puntos claves en los que los préstamos y créditos se diferencian:
El plazo
Los créditos se solicitan para un determinado plazo de tiempo, pero una vez concluido este tiempo se puede renovar y ampliar el crédito.
En el préstamo esto no se puede hacer, es un plazo concluyente.
La cantidad solicitada
Al pedir un préstamo la entidad te concede la totalidad del dinero que has solicitado.
A diferencia del crédito, en el que tú puedes utilizar todo el dinero, parte de él o nada.
Los intereses
El interés económico que tendrás que pagar en el préstamo corresponde al importe total que has solicitado y debes de hacerlo en el plazo marcado.
Por su parte, el interés al pedir un crédito lo abonas en función del dinero que has usado en un determinado periodo de tiempo.
La flexibilidad
Al solicitar un crédito tienes flexibilidad, puedes disponer del dinero que precises en cualquier momento. Siempre dentro del límite que se ha establecido en el contrato firmado.
En el préstamo, sin embargo, la cantidad se ha fijado al principio y ya no se puede modificar. No puedes ampliarlo aunque sí hacer amortizaciones para reducir la cantidad de dinero a pagar o el plazo de tiempo.
Algo común entre los préstamos y créditos:
Al pedir una financiación ajena confirmas que puedes hacer frente a ella cuando toque devolverlo. Devolverlo debe ser una prioridad para ti para no entrar en un bucle de deudas o descontrol de tu economía.
Si no haces frente al cobro del préstamo o crédito solicitado:
- Pueden cobrarte intereses por la demora. Unos intereses que pueden ir acumulándose mientras sigues pagando la deuda inicial.
- Pueden realizarte una reclamación judicial de reembolso. Legalmente pueden pedirla a partir de los 3 meses.
- Pueden incluirte en la lista de morosos que pueden ser consultadas y dificultar que consigas próximos procesos de financiación.
- Pueden embargarte tus bienes personales, aquellos que hayas avalado a la hora de lograr ese préstamo.
Como ves además de las diferencias entre préstamos y crédito también existe un nexo común: la devolución.
¿Cuándo pedir un préstamo o un crédito?
Todo depende del uso que quieras hacer del dinero.
En resumidas cuentas:
- El préstamo es una cantidad que pides cuando quieras hacer una compra de una cantidad exacta, sabiendo lo que vas a gastar.
- El crédito es una especie de colchón económico del que tirar cuando lo necesites, pero, como decimos, sin pasarte de lo acordado.
Por eso, los préstamos suelen acordarse para la compra de coches o una reforma. Mientras que los créditos suelen ser fuente de financiación para empresas o autónomos.